"LA ANTIGUA PRÁCTICA DE LA ANCIANA EUFROSINIA" VALENCIA 28 NOVIEMBRE 19:30 H

El secreto de la anciana Eufrosinia era que estaba colmada de Espíritu Claro. Aprendió a acumularlo y después enseñó a otros cómo hacerlo. 

Como heredera de la rama de los acumuladores de espíritu claro conoció las llaves prácticas para curar el alma. De su enseñanza se extraen instrucciones concretas, sencillas y rigurosas, pero llenas de amor justo. Son las instrucciones que una madre sabia y benevolente ofrecería a sus hijos.  
Por su propia experiencia supo que es falsa la doctrina de la incurabilidad del alma y que TODO se puede vencer.
Fue maestra en prácticas como la ablución en fuentes sagradas, las postraciones, el ayuno, la oración viva…  Las realizaba tanto para conservar su estado interior —paz imperturbable, espíritu claro— como para ayudar a todas la personas que acudían a ella. Según la petición que le hacían, a algunas solo las podía ayudar puntualmente, curar, sanar…  mientras que a las que querían seguirla, les enseñaba cómo alcanzar las condiciones adecuadas para aceptar la luz, cómo hacer que les fuese devuelto el espíritu de los ungidos, los cristos, los bodhisattvas, las marías magdalenas…  un patrimonio que pertenece cada alma humana. 



Una de las cualidades de la anciana Eufrosinia fue su absoluta amundanidad. La amundanidad fue su escudo y protección, hizo posible que llevara a cabo su misión de ayudar al mundo. Tanto a nivel espiritual: una sola anciana podía vencer a terribles fuerzas opuestas, malignas; como a nivel terrenal: siendo santa verdadera pudo pasar desapercibida en tiempos de persecuciones comunistas. 
Sin duda la amundanidad merece una explicación más extensa. Retomaremos este concepto en otro artículo. 

Mientras tanto: ¡Acumulad espíritu claro!